Según han informado fuentes policiales, la denuncia se produjo el martes por la mañana, y por la tarde se había detenido a un joven sospechoso, que luego pasó a disposición judicial.
El presunto autor, A.R.M., de 33 años, accedió al local tras fracturar las chapas de aluminio de la parte baja de las dos puertas de entrada.
En su vivienda tenía una torre con una pantalla y los dos escáneres, otros dos monitores de ordenador y numerosos útiles para perpetrar robos, como, entre otras, tres cizallas de gran tamaño, una maza, una palanqueta.