A pesar de estar casi en semifinales, las sensaciones no son acordes con la situación en el torneo. España sigue siendo un equipo irregular, sin la defensa que le llevó a la gloria en el Sant Jordi, y con un ataque demasiado dependiente de uno o dos jugadores por partido. Y eso que ha recuperado para la causa a Julen Aguinagalde.
Porque la buena noticia del encuentro de este lunes es que Julen Aginagalde está en perfecto estado físico. El pivote vasco hizo estragos a la defensa austriaca sobre todo en una gran primera parte. Sus números así lo atestiguan: ocho goles, seis al descanso, y un porcentaje de acierto del 80 %.
Con estos dos puntos, España se queda con seis y se jugará el pase a las semifinales el próximo miércoles ante Macedonia. A los de Manolo Cadenas les sirve un empate ante la ya eliminada selección balcánica para jugar los partidos por las medallas.