Aunque el texto procedente del Senado aún no se ha votado -será al final del Pleno de la Cámara Baja-, la mayoría absoluta del PP permitirá que salga adelante una ley que no satisface del todo a la oposición, que ha criticado las prisas del Gobierno para aprobarla y su afán recaudatorio, entre otros reproches.
"No pudieron hacer caja y se montó el lío", ha dicho el diputado socialista Carles Corcuera en el debate. "Menos multas y más invertir", ha enfatizado el representante de UPyD Toni Cantó. Ofrece una "mala imagen" de la que los españoles no merecen ser "titulares", ha asegurado Ricardo Sixto, de la Izquierda Plural. Es un 'totum revolutum'" y elaborada a "salto de mata", ha aseverado Jordi Jané, de CiU.
La reforma no entrará en vigor hasta un mes después de publicarse en el BOE, salvo las modificaciones de las velocidades o las medidas relacionadas con los sistemas de retención infantil (SRI), que se regularán en el futuro Reglamento de Circulación, cuya aprobación no se producirá antes de junio.
De todos modos, la ley ya incluye una tabla que dará cobertura a los nuevos límites de velocidad que incluirá el Reglamento y que, de aprobarse, supondrá aumentar a 130 kilómetros por hora el máximo en autovías y autopistas, pero solo en los tramos que se considere idóneos y con determinadas condiciones.
Los límites máximos de velocidad en el resto de carreteras interurbanas se reducirán en 10 km/hora y en muchas las calles de las ciudades no se podrá circular a más de 20 ó 30 km/h.