La gran mayoría de los diputados del Grupo Socialista en el Congreso -uno de los centros de poder más importantes del PSOE- le apoya, ya sea de forma abierta o más o menos reservada. Como ha podido confirmar EL MUNDO, al menos 62 parlamentarios de 110 están con Sánchez, más del doble que los que dan su apoyo o prefieren a Eduardo Madina (31).
En el Congreso está el principal centro de poder del PSOE. Muchos miembros de la Ejecutiva Federal son diputados (Alfredo Pérez Rubalcaba, Elena Valenciano hasta el viernes...); en el Hemiciclo se sientan barones (Ximo Puig, César Luena...) o sus personas de confianza, así como históricos como Alfonso Guerra, Manuel Chaves..., líderes provinciales, alcaldes... Así hasta 110.
El candidato Pedro Sánchez ha tenido la habilidad y los apoyos suficientes para hacerse con la mayoría del Grupo Socialista. Todo a pesar de ser un diputado de base y de tener enfrente al secretario general y número dos del Grupo Socialista; o quizá por eso, como apuntaba ayer un destacado parlamentario.
Madina lleva años preparándose para dar el salto e intentar liderar el partido y todos los diputados lo sabían. Pero nunca estuvo muy claro si lo haría o no y esa indecisión ha jugado en su contra, según fuentes parlamentarias y la labor de captación que han hecho Sánchez y los diputados andaluces y valencianos -sobre todo- han dado un vuelco a esa mayoría.
Aclarado este asunto, dejaremos de hablar de tonterías para saber qué es lo que propone cada candidato. Mucho me temo que esto no ha hecho más que empezar y que con esto lo único que se pretende es emponzoñar el proceso para no hablar de lo que de verdad importa: la política.