"Mujeres secuestradas pudieron contactar a la Misión e informaron que el Estado Islámico les ha quitado a sus hijos y que las mujeres son entregadas a los combatientes, vendidas o esclavizadas por negarse a convertirse (al islam)", dijo el coordinador de los expertos y grupos de trabajo de derechos humanos de la ONU, Chaloka Beyani.
En una sesión de emergencia del Consejo de Derechos Humanos de la ONU sobre Irak, también se denunció el reclutamiento forzado de niños por parte del grupo extremista, que los envía al frente de combate para que sirvan de escudos de los combatientes adultos. Otros son obligados a dar sangre para insurgentes heridos, enviados a patrullar, a ocuparse de puestos de control ilegales y en algunos casos a perpetrar ataques suicidas.