Los bombardeos que se produjeron en el distrito de Bab Amron, el que tiene una situación más crítica, fueron los causantes de la muerte de estos dos periodistas. Marie Colvim era una estadounidense que trabaja para el diario “The Sunday Times”, tenía 56 años de edad. Remi Ochlik era un joven freelance francés de 29 años ganador de un World Press Photo.
La ciudad de Horms lleva más de un mes asediada y el número de víctimas incrementa cada día y la ayuda humanitaria no puede llegar. Cruz Roja demanda de forma inmediata la apertura del país para enviar suministro sanitario y poder evacuar a los civiles. El total de víctimas en Siria desde que empezaron los ataques en marzo de 2011 es de 7.600 según la agencia de noticias France Presse.
Varios periodistas se encuentran heridos y necesitan de urgente intervención quirúrgica, pero la ayuda no puede acceder. Los cuerpos de Colvin y Ochlik no han podido ser encontrados debido a los continuos ataques producidos en la ciudad de Horms.
Los gobiernos occidentales se muestran firmes contra el régimen de El Asad. Van a buscar soluciones para ponerle fin al enorme asedio que se está produciendo en el país. Con estas dos víctimas ya son siete los reporteros muertos en Siria.