Carbonell acabó con 93.1284 puntos y sólo fue superada por la rusa Svetlana Romashina (95.2680). El podio lo completó la china Sun Wenyan (91.5479).
La interpretación de Réquiem por un sueño entregó a la solista catalana la segunda mejor nota de entre las 12 finalistas.
La española alcanzó la final con la segunda mejor nota y en la lucha entre las doce mejores se mantuvo en ese puesto para proclamarse subcampeona del mundo.