Le llaman “me gusta”, a semblanza del que ha hecho popular a Facebook que ahora incluye incluso otras maneras de relacionarse con los demás, pero aunque pudiera aparentar un cambio menor, el objetivo de los “corazones” es poner de manifiesto el interés de Twitter, por acercarse a otro tipo de público que no sea tan periodístico.
Más simple, más sencillo de usar, cómodo e intuitivo para todos los usuarios. Los favoritos, pueden ocultar un trasfondo ideológico o de aficiones que no se desean compartir, tenían un gran sentido para los que les gustaba permanecer anónimos, pero su uso es, más bien, residual.
Con este movimiento se potencia llegando a otras cotas. “Queremos que Twitter sea una herramienta más fácil y gratificante de usar y sabemos que a veces, la estrella podía generar confusión, especialmente para los recién llegados”, argumentan desde la compañía.
“El corazón es un símbolo universal que va más allá de los idiomas, las culturas y las zonas horarias. Es más expresivo, permite transmitir un mayor abanico de emociones y es fácil de conectar con la gente”, concluyen. ¿Será casualidad que Facebook haya incluido también corazones entre sus nuevas opciones de reacción? Lo dudamos. Cada vez estas dos redes sociales se parecen más y con ello pierden encanto.
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