Urkullu se refiere a esta cuestión en una respuesta escrita, recogida por Servimedia, que ha enviado al Parlamento vasco, donde el diputado del PP Carmelo Barrio preguntó por el "posicionamiento de la Secretaría de Paz y Convivencia sobre homenajes a etarras excarcelados".
Esta secretaría, según explica la propia Lendakaritza en su web, es un órgano que asiste al presidente del Gobierno vasco "en la definición y dirección de la estrategia y actuaciones encaminadas a consolidar definitivamente la paz y lograr la normalización social de la convivencia" El secretario general de este órgano es Jonan Fernández.
La respuesta parlamentaria al PP, que está firmada directamente por el lehendakari, incluye, en primer lugar, su valoración sobre "los homenajes y recibimientos a miembros de ETA excarcelados".
A este respecto, el presidente vasco sostiene que "la formulación de la pregunta utiliza dos conceptos, recibimiento y homenaje, que tienen un contenido político y jurídico diferente y que no deben asimilarse en un mismo significado".
Según Urkullu, "los allegados y amigos de una persona que, por haber estado encarcelada, ha pasado tiempo alejada de su familia, pueden ofrecerle un recibimiento de carácter humano, siempre que esté exento de cualquier forma de exaltación de la violencia".
"Cosa bien distinta", añade el lehendakari, "es ofrecer a una persona que ha sido excarcelada un homenaje político a su militancia en ETA o en cualquier estrategia de violencia o terrorismo. Este tipo de homenaje es éticamente inaceptable e incompatible con la ley y con una mínima sensibilidad con los derechos humanos y hacia las víctimas".