El estudio pormenorizado de las diez últimas declaraciones de la hija menor del Rey, desde 2000 a 2010, no refleja ni una sola irregularidad fiscal, la infanta Cristina únicamente tributó durante todos esos años por su trabajo en 'laCaixa' y por su asignación en representación de la Familia Real, por lo que la Agencia Tributaria atribuye la totalidad de los ingresos de la sociedad Aizoon a Urdangarín.
Tanto Hacienda como la Fiscalía sostienen que la empresa Aizoon, de la que eran propietarios ambos cónyuges, cometió delito de fraude fiscal en los años 2007 y 2008. No obstante, según el informe de la Agencia Tributaria, los ingresos de Aizoon, corresponden única y exclusivamente a trabajos facturados por Iñaki Urdangarín en calidad de asesor en unos casos o como miembro del consejo de administrador de firmas tales como Mixta África, Aceros Bergara o Motor Ibérica en el resto de casos.
Ello les lleva a deducir que únicamente el duque de Palma sería responsable de los tres delitos fiscales: uno de 2006 por defraudar en el Impuesto de Sociedades con el Instituto Noos y dos más en 2006 y 2007 por tributar parte de sus ingresos a través de la sociedad Aizoon, en lugar de hacerlo a título personal.
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