Izquierda Unida de Ávila felicita a los 409 abulenses que han conseguido salir de las listas del paro y encontrar trabajo, “aunque sea uno de esos contratos basura y temporales con los que el Partido Popular pretende poner parches a la grave situación del mercado laboral”. Porque frente a lo positivo de la reducción por tercer mes consecutivo en Ávila de las cifras del desempleo, que cae a los 18.802 parados, “una cifra insoportable para la provincia abulense”, para José Alberto Novoa, coordinador provincial de Izquierda Unida, los datos han de leerse “sosegadamente y con la preocupante perspectiva de futuro de que el 94,6% de los contratos firmados son temporales”.
La formación de izquierdas reconoce por ello que la fuerte caída de la contratación indefinida hace prever, de no tomarse las medidas adecuadas, una caída fuerte tras el final del verano. “Que el 94,6% de las contrataciones hayan sido temporales es preocupante”
Según los primeros datos conocidos, 186 de los contratos suscritos este mes, el 5,4%, son contratos indefinidos. “Frente a la tranquilidad que para algunos puede suponer presentar cifras positivas, para Izquierda Unida es motivo de análisis la constante devaluación y precarización del mercado laboral, lo que hará imposible una constatable recuperación económica desde la que empezar a salir de la crisis” señala José Alberto Novoa, que tiene claro que desde la devaluación salarial que propugna el Partido Popular, apoyado desde el Banco de España, “no puede haber salida a la crisis”.
Para la formación de izquierdas “el fondo a la crisis que entiende haber encontrado el Partido Popular es francamente espeluznante” comenta el coordinador provincial de Izquierda Unida en un escenario de devaluación de los costes laborales, con salarios que se han visto disminuido por sectores entre un 20 y un 50% desde el inicio de la crisis.
“Ávila necesita de la aplicación de un Plan de Empleo desde el que poder articular la salida a la crisis mucho más allá de las simples contrataciones temporales que, pasada la época estival, volverá a engordar nuevos datos negativos”-dicen.
Mucho contrato coyuntural. No se puede ser triunfalista
Unión, Progreso y Democracia (UPyD) de Ávila considera también que la bajada de las cifras del desempleo en la provincia en el mes de mayo es una buena noticia, pero advierte contra el riesgo de pecar de triunfalismo. En este sentido, el concejal del Ayuntamiento de Ávila, Álvaro Aparicio, señala que “hay que preguntarse si se trata de algo estructural o coyuntural”. Una cuestión que responden fácilmente los datos. “Pocos contratos son indefinidos y, de ellos, buena parte son a tiempo parcial”, recalca Aparicio, “lo que refleja tanto el naufragio del contrato de emprendedores como la propia reforma laboral”.
Aparicio recuerda que en la provincia abulense se han registrado 18.802 parados, 409 menos que en el mes de abril, lo que supone un descenso porcentual del 2,13%, según los datos aportados por el Servicio Público de Empleo Estatal.
“El quid de la cuestión es si este aumento del empleo es coyuntural o estructural, y la respuesta no ofrece dudas: es coyuntural. Una economía en recesión, con la producción cayendo, no puede crear empleo anual neto, y el propio Gobierno acaba de empeorar las previsiones para 2013, vaticinando una caída del PIB del 1,3%”, apuntaba Aparicio.
En definitiva, se ha generado empleo, pero un empleo precario que refleja, a juicio de UPyD, el fracaso de la reforma laboral. El carácter coyuntural de la creación de empleo se ve ratificado claramente por los datos, que evidencian la precariedad del empleo que se crea, lo que constituye un nuevo motivo para apoyar, o al menos considerar, la propuesta de contrato indefinido único de UPyD.
Contrato único e indefinido
Desde el partido de Rosa Díez abogan por la implantación del contrato único indefinido, que contempla una indemnización creciente que comenzaría en 12 días por año trabajado (mayor, por tanto, que la que ahora reciben los trabajadores eventuales) que se iría incrementando a razón de dos días por año hasta alcanzar los 34 días para los despidos improcedentes.
El sistema de indemnización portátil (el modelo austríaco) ciertamente supone un pequeño coste para la empresa, pero a cambio le evita afrontar un gran pago en caso de despido. Y como el trabajador lleva esa indemnización consigo al cambiar de compañía, favorece la movilidad de los trabajadores. Para afrontar la indemnización por despido, la empresa iría dotando un fondo que el trabajador podría llevarse a otra con su nuevo contrato. La ventaja de este sistema es que todos los contratos son indefinidos desde el inicio y los derechos laborales son acumulativos: no se pierde antigüedad al cambiar de empleo.
También se evita el riesgo empresarial implícito en convertir a un trabajador eventual en fijo, porque se pasa, poco a poco, de una indemnización muy baja a una mucho más alta, haciendo más atractiva y menos arriesgada la contratación.
Con esta propuesta, señalan, se incentiva además una relación más estrecha entre empresa y trabajador. En un trabajador eventual, la compañía apenas invierte ofreciéndole formación; en cambio, cuando va a estar por tiempo indefinido, a ambos les interesa aumentar los conocimientos y habilidades.