“Excmo. Mons. Jesús García Burillo, Obispo de Ávila:
Su Santidad, El Papa Francisco, profundamente apenado al conocer la noticia del grave accidente de tráfico ocurrido en el término de Tornadizos, ruega a Vuestra Excelencia que tenga la bondad de transmitir su cercanía espiritual a todos los afectados en tan lamentable percance, a la vez que ofrece fervientes sufragios y plegarias, pidiendo a Dios el eterno descanso de los fallecidos en esa tragedia.
Asimismo, el Sumo Pontífice desea hacer llegar a través de Vuestra Excelencia su sentido pésame a los familiares de los difuntos, junto con expresiones de aliento y consuelo a todos los heridos, con el vivo deseo de su pronta y total recuperación.
Con estos sentimientos, en estos momentos de tristeza, el Santo Padre, invocando el dulce nombre de Nuestra Señora de Sonsoles, imparte de corazón la confortadora Bendición Apostólica, como signo de esperanza en Cristo resucitado".