Y es que la actual canciller alemana garantiza que Alemania seguirá apoyando a estos países para que avancen en las reformas que necesitan pero se negó a ejercer una "falsa solidaridad".
Merkel, candidata a la reelección en los comicios del próximo 22 de septiembre, ratificaba así su línea de acción europea mientras su rival reconocía la necesidad de políticas de consolidación fiscal en países como Grecia, pero rechazaba aplicarlas en "dosis mortales".
La posibilidad de un tercer rescate para Atenas es uno de los ejes de esta campaña electoral alemana y Merkel no quiso descartar que se necesite, pero se negó a especular a este respecto y destacó que nadie puede saber el volumen de ese nuevo paquete de ayudas: "Dependerá de cómo se desarrolle la situación en Grecia", dijo.
Merkel dejó clara su apuesta por el euro, que "garantiza el bienestar y el trabajo en Alemania", mientras volvía a responsabilizar a los socialdemócratas del "error" en el que se incurrió cuando gobernaban pues permitieron que Grecia entrara a formar parte de la eurozona sin cumplir con todos los requisitos.
Alemania tiene una responsabilidad en Europa
En este contexto Merkel, que durante toda la campaña ha insistido en que no habrá una nueva quita de la deuda griega, se negó a ejercer una "falsa solidaridad" y apostó por el principio "solidaridad y responsabilidad propia", "prestación y contraprestación".
Por su parte, Steinbrück recordó a Merkel que los países europeos en crisis no han podido recuperarse a pesar de estas ayudas y le reprochó que se olvide de las políticas en favor del crecimiento y de la creación de empleo para los jóvenes.
Alemania, subrayó el candidato socialdemócrata, fue ayudada "de forma masiva" después de la II Guerra Mundial y tiene ahora una "responsabilidad" en Europa.
Si (
No(
