17/12/2024@17:37:41
Un nuevo estudio liderado por la Estación Biológica de Doñana – CSIC, con la participación del investigador David Galadí de la Universidad de Córdoba, revela que el plumaje blanco de la lechuza común podría ser una adaptación para camuflarse durante la caza nocturna. A diferencia de otros búhos, su coloración permite que se vuelva casi invisible bajo la luz de la luna, dificultando su detección por parte de presas como los roedores. Este hallazgo sugiere que las lechuzas más claras pueden tener una ventaja en noches iluminadas, lo que también plantea implicaciones sobre cómo la contaminación lumínica afecta a los ecosistemas. El estudio ofrece nuevas perspectivas sobre el camuflaje nocturno y su relación con el ciclo lunar.