Un padre y una hija están involucrados en la investigación de una adolescente asesinada en el pintoresco pueblo ficticio de Cárdena, ambientado en Andalucía. Los dos se ven obligados a dejar de lado sus diferencias y sucumbir a su tensa relación para resolver el caso de asesinato que sacude un pueblo supuestamente pacífico, donde todos los habitantes son sospechosos.
Desde hace años Laura busca a su hermana Sara, desaparecida en medio de la selva del Congo. Ni la ONG para la que trabaja, ni la embajada tienen noticias de su paradero hasta que aparece una foto de Sara en un poblado minero del este del Congo.
Julia acude a un hotel del centro de Madrid con una pequeña maleta como único equipaje y elige para alojarse la misma habitación en la que hace más de veinte años vivió una una experiencia vital que no ha podido olvidar.