La Audiencia Provincial de Cantabria les condena a penas de 28, 24 y 14 años de prisión por delitos de trata con fines de explotación sexual en concurso con prostitución coactiva, y delitos de ayuda a la inmigración ilegal. Todos son de nacionalidad nigeriana y actuaban en colaboración con otros compatriotas que se encargaban de captar en el país de origen a mujeres jóvenes en situación de precariedad