De esta manera, el Ministro confirma que en el caso de que haya “sobrante” de agua se puede pensar en transferirla entre cuencas excedentarias a deficitarias. Eso sí, basándose en criterios de unidad de cuenca, de sostenibilidad ambiental, de prioridad de uso para la propia cuenca y de solidaridad entre territorios de manera que se garantice el derecho de todos de disponer de agua suficiente y de calidad.
Por otra parte, Arias Cañete ha explicado que el Ministerio pretende mejorar la gestión del agua mediante una mejora y modernización de la redes, especialmente en las grandes ciudades dada su marcada deficiencia. Esto implicará realizar “muchos esfuerzos para evitar grandes pérdidas”.
Con respecto a la disputa sobre el control del Guadalquivir y la determinación de a quien corresponde la competencia, el Ministro afirmó que su Ejecutivo “no ha tomado posición” y se esta centrando en solucionar “los problemas de la ejecución de la sentencia” –del Tribunal Constitucional que anuló la transferencia exclusiva del Guadalquivir a la Junta de Andalucía.