A través de un comunicado, CNMC aduce prácticas contrarias a la Ley de Defensa de la Competencia, ya que considera que son constitutivas de cártel.
En concreto, este organismo considera probada una infracción única y continuada consistente en el intercambio sistemático de información confidencial comercialmente sensible, tanto actual como futura y altamente desagregada, que cubría la práctica totalidad de las actividades realizadas por las empresas sancionadas.
La cuota de mercado conjunta de las marcas participantes en las conductas analizadas en este expediente sancionador alcanza en torno al 91% de la distribución de automóviles en España, lo que incluye la casi totalidad de marcas denominadas generalistas y alguna de las denominadas 'premium'.