Lena consigue escapar del psiquiátrico ruso en el que está recluida y viaja a EE.UU., haciéndose pasar por la hija desaparecida de una familia adinerada
Pauline y sus dos hijas adolescentes, Beth y Vera, heredan una casa. La primera noche en su nuevo hogar sufren el ataque salvaje de un grupo de intrusos. Pauline y las chicas deberán luchar para salvar sus vidas.