El amigo con derecho a roce nos permite experimentar cosas que tal vez no haríamos con nuestra pareja -por ejemplo, un menage a trois- o que nos averguenza demasiado.
No hay nada más complicado que las relaciones humanas. Hombres y mujeres se enamoran y se desenamoran cada día. Algunos consiguen alcanzar la felicidad mientras otros la buscan en vano.