La madrugada del 2 de enero de 1921, el buque Santa Isabel, con destino Buenos Aires y 260 personas a bordo, se hunde frente a la escarpada y dura costa de la isla de Sálvora, en Galicia.
Una mañana, Clara (Mireia Oriol), la hija adolescente de Mónica (Belén Rueda) desaparece en extrañas circunstancias. Horas más tarde es encontrada inconsciente, con vida pero condenada a una muerte inminente.
Javier (Inmanol Arias), un ejecutivo de una multinacional, comete un pequeño error, indica mal una dirección a un desconocido que le pregunta en la calle (Darío Grandinetti). Esta equivocación se transformará en su peor pesadilla...