Un estudio internacional publicado en la revista Nature Mental Health ha identificado tres perfiles psicológicos que podrían influir en la evolución de la salud mental, cognitiva y cerebral durante el envejecimiento. Liderado por el profesor David Bartrés-Faz, el análisis incluyó a más de mil adultos de mediana edad y mayores, revelando que las características psicológicas específicas pueden afectar el riesgo de demencia, la velocidad del deterioro cerebral y la calidad del sueño. Estos hallazgos sugieren la necesidad de evaluaciones psicológicas integrales para desarrollar estrategias de prevención personalizadas y mejorar la salud cognitiva en las personas mayores.
Un reciente estudio internacional, publicado en la revista Nature Mental Health, ha revelado tres perfiles psicológicos que podrían influir en la evolución de la salud mental, cognitiva y cerebral durante el envejecimiento. La investigación, liderada por el profesor David Bartrés-Faz, abarca un análisis exhaustivo de más de mil adultos de mediana edad y personas mayores.
Los hallazgos indican que las características psicológicas específicas asociadas a cada perfil pueden afectar no solo el riesgo de desarrollar demencia, sino también factores como la velocidad del deterioro cerebral y la calidad del sueño. Estos descubrimientos sugieren nuevas oportunidades para diseñar estrategias de prevención más personalizadas.
El equipo investigador enfatiza la importancia de realizar evaluaciones psicológicas integrales para identificar los diferentes perfiles y así implementar intervenciones adaptadas a cada individuo. El profesor Bartrés-Faz es parte del Instituto de Neurociencias (UBneuro) y del Instituto de Investigaciones Biomédicas August Pi i Sunyer (IDIBAPS), además de ser investigador principal de la Barcelona Brain Health Initiative.
Las investigaciones recientes han señalado características psicológicas que pueden estar relacionadas con un mayor riesgo o protección frente al deterioro cognitivo. Por ejemplo, pensamientos negativos recurrentes y una alta percepción del estrés se asocian con un mayor riesgo, mientras que tener un sentido claro de propósito vital puede ofrecer protección contra este declive.
Este estudio se basa en datos obtenidos de más de 1.000 voluntarios participantes en la BBHI y en el estudio internacional Medit-Ageing. Se examinó cómo estos factores se agrupan en perfiles psicológicos similares entre dos cohortes independientes: adultos de mediana edad y mayores sin deterioro cognitivo.
Bartrés-Faz señala que hasta ahora los factores psicológicos han sido analizados casi exclusivamente por separado, lo cual limita la comprensión integral del fenómeno. En este contexto, el estudio busca dilucidar cómo diversas combinaciones de características psicológicas influyen en la salud mental, cognitiva y cerebral.
Los resultados indican que un perfil psicológico equilibrado, con niveles moderados tanto de factores protectores como de riesgo, se relaciona con una mejor salud cognitiva y mental. Esta tendencia se observó en todas las franjas etarias estudiadas, resaltando la importancia del equilibrio psicológico como determinante clave en el bienestar durante la adultez y vejez.
Por otro lado, aquellos con bajos niveles en características protectoras presentan peores resultados cognitivos y mayor atrofia cerebral, incluso desde la mediana edad. Además, un tercer perfil caracterizado por altos niveles de rasgos negativos podría incrementar significativamente el riesgo de deterioro cognitivo a través de síntomas psicoafectivos como depresión y ansiedad.
Los hallazgos tienen potenciales implicaciones para el desarrollo de intervenciones preventivas dirigidas a modificar factores psicológicos adversos. Bartrés-Faz sugiere que aquellos con rasgos asociados a perfiles menos saludables podrían beneficiarse especialmente de terapias centradas en identificar comportamientos valiosos y propósitos vitales.
A medida que estos resultados sean validados mediante estudios más amplios, se espera que contribuyan a una mejor estimación del perfil psicológico individual y sus riesgos asociados. Este enfoque integral podría transformar las estrategias actuales hacia una atención más personalizada en el ámbito de la salud mental.
Artículo referencial:
Bartrés-Faz, David; Demnitz-King, Harriet; Cabello-Toscano, María, et al. «Psychological profiles associated with mental, cognitive and brain health in middle-aged and older adults». Nature Mental Health, enero de 2025. DOI: https://doi.org/10.1038/s44220-024-00361-8
El estudio identificó tres perfiles psicológicos que están relacionados con distintos patrones de deterioro cognitivo y cerebral en el envejecimiento.
La investigación es liderada por el profesor David Bartrés-Faz, quien es investigador de la Facultad de Medicina y Ciencias de la Salud de la Universitat de Barcelona.
El estudio analizó a más de mil personas adultas de mediana edad y personas mayores.
Los hallazgos abren nuevas perspectivas para diseñar estrategias de prevención más personalizadas contra el deterioro cognitivo y demencia.
Factores como pensamientos negativos repetitivos, angustia y estrés percibido se asocian con un mayor riesgo, mientras que tener un sentido de propósito vital se considera un factor protector.
Se sugiere realizar evaluaciones psicológicas integrales para identificar diferentes perfiles psicológicos y permitir implementar estrategias de cambio de comportamiento más específicas.