El Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha ha confirmado la condena a cinco años de prisión para un joven de 22 años por agredir y retener a su expareja, violando una orden de alejamiento. El acusado, que había mantenido una relación con la víctima durante tres años, fue hallado culpable de detención ilegal y lesiones leves tras un incidente en el que la forzó a entrar en su vehículo y le propinó un puñetazo. La mujer logró enviar un mensaje pidiendo ayuda antes de ser liberada por la policía. Además, se le ordenó indemnizar a la víctima con 2.000 euros.
El Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha ha desestimado el recurso presentado por un joven de 22 años, quien fue condenado a cinco años de cárcel por quebrantar una orden de alejamiento y cometer delitos de detención ilegal y lesiones leves en el contexto de la violencia de género. El acusado retuvo a su expareja durante varias horas, ignorando la prohibición judicial que le impedía acercarse a ella.
La relación entre el condenado y la víctima se extendió por tres años. El 28 de agosto de 2023, un juzgado en Guadalajara impuso al joven la restricción de no comunicarse ni acercarse a menos de 500 metros de la mujer. Sin embargo, el 13 de septiembre, el acusado se presentó en el domicilio de su expareja en Mondéjar, donde se encontraba su madre, quien le solicitó que abandonara el lugar.
El 20 de septiembre, el joven localizó a la víctima en un parque y, tras agarrarla del pelo, la forzó a entrar en su vehículo. Durante este ataque, le propinó un puñetazo en la cara. Posteriormente, condujo hasta un descampado en Guadalajara antes de dirigirse a la casa de sus tíos. En ese momento, la mujer logró convencer al agresor para que le permitiera ir al baño, oportunidad que utilizó para enviar un mensaje a su padrastro solicitando ayuda policial.
La retención duró varias horas hasta que las autoridades llegaron al lugar. El acusado fue detenido y enviado a prisión provisional tras los hechos.
Los magistrados del tribunal fundamentaron su decisión en las declaraciones consistentes y detalladas de la víctima, destacando su credibilidad. Según los jueces, "los hechos probados traen causa directamente de las manifestaciones" realizadas por ella sobre el quebrantamiento de la medida cautelar y los delitos cometidos.
Aparte del tiempo en prisión, la sentencia también establece que el joven deberá indemnizar a la denunciante con 2.000 euros, como parte del fallo ratificado por la Sala de lo Civil y Penal del TSJCLM.
Cifra | Descripción |
---|---|
5 | Años de prisión condenados al acusado |
22 | Años de edad del acusado |
500 | Métricos de distancia a los que se le prohibió acercarse a la víctima |
2,000 | Euros de indemnización a pagar a la denunciante |
Se ratificó la condena de cinco años de prisión a un joven de 22 años por quebrantamiento de medida cautelar, detención ilegal y lesiones leves en el ámbito de la violencia de género.
El acusado retuvo a su expareja durante varias horas, a pesar de tener una orden de alejamiento que le prohibía acercarse a ella. La agredió físicamente y la mantuvo en contra de su voluntad.
El juzgado había prohibido al acusado comunicarse y acercarse a su expareja a menos de 500 metros desde el 28 de agosto de 2023.
La víctima logró enviar un mensaje a su padrastro pidiendo ayuda, lo que llevó a que la policía fuera alertada y detuviera al acusado.
El tribunal también condenó al acusado a indemnizar a la denunciante con 2.000 euros.