La satisfacción con la atención primaria en España ha alcanzado un 84,2%, según el Barómetro Sanitario de octubre de 2024. Este aumento en la valoración se debe a la confianza y seguridad que transmiten los profesionales de la salud. Aunque el porcentaje ha crecido desde el 80,9% en 2023, la percepción general sobre el sistema sanitario muestra una puntuación de 6,1 sobre 10. Además, un 54,6% de la población considera que el funcionamiento del sistema es positivo. Sin embargo, persisten preocupaciones sobre la equidad y accesibilidad en los servicios de salud, así como un aumento en las listas de espera para atención especializada. La encuesta también destaca la necesidad de atención a problemas de salud mental, con un 17,6% de los encuestados buscando ayuda profesional.
La satisfacción con la atención primaria alcanza un 84,2%
El último Barómetro Sanitario, correspondiente a la tercera oleada de 2024, revela que la satisfacción de los usuarios con la atención primaria ha aumentado hasta el 84,2%. Este incremento se refleja en la confianza y seguridad que los pacientes sienten hacia el personal médico y de enfermería, quienes obtienen puntuaciones de 8,13 y 7,89 sobre 10, respectivamente.
Comparado con las oleadas anteriores, esta cifra representa un notable aumento respecto al 80,9% registrado en 2023 y el 79,9% en 2022. La encuesta, realizada desde 1993 por el Ministerio de Sanidad junto al Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), incluye más de 2.440 entrevistas en cada oleada.
Aproximadamente el 80,3% de los adultos mayores de 18 años ha visitado a un médico de atención primaria en el último año. Además, un 19,7% recibió atención telefónica durante su última consulta. Los datos también indican que quienes han utilizado otros servicios sanitarios muestran una valoración positiva: el 81,5%% califica favorablemente las consultas con médicos especialistas y más del 90%% considera buena o muy buena la atención recibida durante su ingreso hospitalario.
A pesar de estos resultados positivos en servicios específicos, solo el 54,6%% de la población general valora positivamente el funcionamiento del sistema sanitario español. En una escala del 1 al 10, la satisfacción con el sistema público se sitúa en 6,1 puntos, destacando los servicios del 061/112 y la atención a pacientes ingresados con puntuaciones de 7,31 y 7,13, respectivamente.
Aunque la atención primaria recibe una calificación media de 6,22 puntos, existe una percepción menos positiva entre la población general respecto a este servicio y a las consultas especializadas ambulatorias. Tras la pandemia, la valoración ha mostrado un descenso significativo; anteriormente se encontraba en un nivel alto con una puntuación de 7,3.
Casi un 38%% de los encuestados considera que no todos reciben los mismos servicios según su comunidad autónoma. Además, un 35,5%% opina que existen desigualdades basadas en la capacidad individual para manejar nuevas tecnologías. En términos socioeconómicos y demográficos, se observa mayor igualdad en el trato recibido.
A partir del Barómetro Sanitario se destaca que solo el 21,2%% logró ser atendido por su médico/a de atención primaria el mismo día o al siguiente tras solicitar cita; en comparación con el 43%% registrado en 2019. La espera media es actualmente de 8,9 días, lo que muestra una ligera disminución respecto al año anterior.
Cerca del 38%% de los encuestados opina que las listas de espera para atención especializada han empeorado. En cuanto a criterios para priorizar operaciones quirúrgicas, más del 57%% considera que debe prevalecer el criterio médico.
Novedosamente, esta edición del Barómetro incluye preguntas sobre salud mental. Un 17,6%% refiere haber necesitado consultar a un profesional por problemas relacionados con su bienestar psicológico o emocional en los últimos doce meses. Entre ellos, aproximadamente el 46,4%% fue atendido principalmente en la sanidad pública.
A pesar de las preocupaciones sobre efectos adversos asociados a las vacunas —con un 37%% manifestando esta creencia— hay un alto grado de aceptación: alrededor del 88,7%% confía en su efectividad protectora tanto para sí mismos como para quienes les rodean.
Aproximadamente el58,8% %de los entrevistados posee algún tipo de certificado electrónico para realizar trámites administrativos. Sin embargo,41,9% %ha accedido a su historia clínica electrónica.
El uso del sistema telemático también ha sido significativo: más del< em >56% de los encuestados han realizado consultas telefónicas con sus médicos durante el último año.
Cifra | Valor |
---|---|
Satisfacción con la atención primaria | 84,2% |
Satisfacción en 2023 | 80,9% |
Satisfacción en 2022 | 79,9% |
Valoración de atención primaria (octubre 2024) | 6,22 puntos |
Valoración de consultas especializadas | 5,80 puntos |
Percepción de desigualdades territoriales | 38,8% |
Esperanza media para cita médica | 8,9 días |
Necesidad de consulta por salud mental | 17,6% |
Satisfacción con atención en salud mental (sanidad pública) | 84,2% |
La satisfacción con la atención primaria ha crecido hasta el 84,2% en la tercera oleada del Barómetro Sanitario correspondiente a octubre de 2024.
Los aspectos mejor valorados por los pacientes son la confianza y seguridad que transmite tanto el personal de enfermería como el personal médico.
El porcentaje de satisfacción ha aumentado respecto a años anteriores: 80,9% en 2023 y 79,9% en 2022.
El 54,6% de la población general valora positivamente el funcionamiento de la sanidad en España.
La espera media para ser atendido es de 8,9 días, aunque un 21,2% fue atendido el mismo día o al día siguiente.
Casi un 38% percibe que no se reciben los mismos servicios según la comunidad autónoma de residencia.
Un 17,6% de los entrevistados refirió haber tenido necesidad de consultar a un profesional sanitario por problemas de salud mental o malestar psicológico en los últimos 12 meses.
El 84,2% de las personas atendidas en la sanidad pública declaran estar satisfechas con la atención recibida en consulta relacionada con salud mental.
La aceptación de las vacunas es alta; un 88,7% cree que tienen efectos protectores sobre ellos mismos y un 89,4% sobre las personas con las que conviven.
El 41,9% ha accedido a su historia clínica electrónica mientras que un 58% no lo ha hecho nunca.