La Oficina del Fiscal Público Europeo (EPPO) ha llevado a cabo una operación masiva, denominada 'Nimmersatt', que resultó en 10 arrestos, incluido un presunto líder de una organización criminal dedicada al contrabando de coches de salvamento peligrosos desde Estados Unidos hacia Europa. La acción involucró a 1,000 policías y funcionarios fiscales en 10 países, con 200 registros realizados. Esta red criminal importaba vehículos dañados, los reparaba superficialmente y los vendía evadiendo impuestos y poniendo en riesgo la seguridad vial. Las investigaciones revelaron un esquema complejo que abarca múltiples países europeos y se estima que causó daños por al menos 31 millones de euros en impuestos no pagados.
Diez detenidos en una operación internacional contra el tráfico de coches dañados
En una acción coordinada por la Fiscalía Pública Europea (EPPO), se han llevado a cabo 200 registros en diez países, resultando en la detención de diez sospechosos, entre ellos un presunto líder de la organización delictiva. La operación, que tuvo lugar el 16 de abril de 2025, involucró a más de 1,000 agentes de policía y funcionarios fiscales y aduaneros en una investigación sobre un grupo criminal que importaba coches siniestrados desde Estados Unidos para su posterior venta tras reparaciones superficiales, eludiendo así los aranceles aduaneros y el IVA.
Esta investigación, denominada ‘Nimmersatt’ (que significa ‘Insaciable’ en alemán), abarca un amplio espectro geográfico que incluye no solo a Estados Unidos y Rusia, sino también a Canadá, Hungría, Irlanda y el Reino Unido, así como a once países miembros de la UE. Las medidas investigativas se realizaron en Bulgaria, Estonia, Alemania, Hungría, Letonia, Lituania, los Países Bajos, Portugal, Rumania y España.
El esquema delictivo descubierto revela una vasta red dedicada al contrabando de vehículos gravemente dañados desde Estados Unidos hacia Europa. Estos coches son vendidos a consumidores finales después de reparaciones superficiales que engañan sobre su estado real. Esto no solo representa un fraude fiscal significativo al evadir el pago de aranceles e impuestos sobre el valor añadido (IVA), sino que también pone en peligro la seguridad vial en Europa.
Los grupos criminales aprovechan el mercado estadounidense donde los vehículos dañados son frecuentemente subastados o desmantelados. La organización investigada adquiría grandes cantidades de estos automóviles a través de subastas gestionadas por compañías aseguradoras estadounidenses y luego los enviaba a Europa utilizando una red de empresas ficticias y facturas falsas para ocultar su origen.
Los coches llegan a puertos europeos como Amberes (Bélgica), Bremerhaven (Alemania), Klaip?da (Lituania) y Rotterdam (Países Bajos). Para evitar pagar aranceles significativos, los delincuentes presentan facturas fraudulentas que declaran valores mucho menores a los realmente pagados por los vehículos. Posteriormente, estos automóviles son transportados por tierra hasta Lituania para ser “reparados” en talleres mecánicos locales.
A pesar de las aparentes reparaciones realizadas para hacerlos lucir como nuevos y cumplir con las certificaciones técnicas requeridas, muchos vehículos continúan presentando daños ocultos que comprometen su seguridad. Al ser vendidos en Alemania y otros países europeos como si nunca hubieran tenido accidentes, estos coches representan un riesgo considerable para sus nuevos propietarios.
La investigación ha revelado que este grupo criminal también empleaba tácticas para lavar los beneficios obtenidos del fraude fiscal mediante empresas lituanas. Desde 2020, al menos 16,500 coches fueron vendidos desde Lituania por un total aproximado de 144 millones de euros. Este fraude permitió además vender vehículos siniestrados a precios inferiores al mercado legítimo, generando competencia desleal.
Las autoridades estiman que las actividades ilegales han causado pérdidas superiores a 31 millones de euros en impuestos no pagados. Hasta ahora se han congelado cuentas bancarias por un valor total de 26.5 millones de euros y se han confiscado 116 coches valorados en aproximadamente 2.3 millones de euros junto con medio millón de euros en efectivo y bienes lujosos.
La complejidad del esquema delictivo ha sido desvelada gracias al trabajo conjunto entre la EPPO y diversas autoridades nacionales europeas. Esta investigación fue iniciada por la Oficina de Investigación Fiscal de Dresde en Alemania y ha contado con el apoyo crucial del Servicio Financieramente Criminal de Lituania (FNTT), Europol y Eurojust.
Todas las personas implicadas son consideradas inocentes hasta que se demuestre lo contrario ante los tribunales competentes. La EPPO actúa como oficina independiente encargada de investigar delitos contra los intereses financieros de la Unión Europea.
Cifra | Descripción |
---|---|
10 | Arrestos, incluyendo un presunto líder. |
200 | Búsquedas realizadas en 10 países. |
16,500 | Coches vendidos desde Lituania. |
€144 millones | Ingresos generados por la venta de coches. |
€31 millones | Estimación de daños en IVA y derechos de aduana. |
€26.5 millones | Órdenes de congelación otorgadas. |
116 | Coches incautados, valorados en aproximadamente €2.3 millones. |
€500,000 | Efectivo y artículos de lujo incautados. |
La investigación ‘Nimmersatt’ es una acción liderada por la Oficina del Fiscal Público Europeo (EPPO) que se centra en una organización criminal que importa coches de salvamento desde los Estados Unidos a Europa, evadiendo impuestos y poniendo en peligro la seguridad vial.
Se han realizado 10 arrestos, incluyendo a uno de los presuntos líderes de la organización criminal.
Las búsquedas se realizaron en 10 países, incluyendo Alemania, Lituania, Bulgaria, Estonia, Hungría, Letonia, Países Bajos, Portugal, Rumanía y España.
El esquema implica la compra de coches dañados en EE. UU., su envío a Europa con facturas falsas para ocultar su origen y su posterior venta tras reparaciones superficiales que no abordan daños graves, engañando así a los consumidores europeos.
Los vehículos importados pueden tener daños ocultos que representan serios peligros para la seguridad de los conductores y pasajeros en Europa.
El daño causado por estas actividades se estima en al menos 31 millones de euros en impuestos no pagados y derechos aduaneros.
Se han congelado cuentas bancarias por un total de hasta 26.5 millones de euros y se han incautado 116 coches valorados en aproximadamente 2.3 millones de euros, así como efectivo y bienes de lujo.