Andalucía ha lanzado "la patrulla canina de Justicia", un innovador proyecto en Huelva que busca acompañar a víctimas vulnerables durante los procesos judiciales. Este programa, parte del Plan de Humanización de la Justicia, incluye la terapia con perros adiestrados para reducir la ansiedad de quienes deben declarar en los juzgados. El consejero José Antonio Nieto presentó esta iniciativa, que se implementará inicialmente con menores y podría extenderse a otras víctimas como las de violencia de género. La presencia de estos animales tiene como objetivo crear un entorno más amigable y mejorar el bienestar emocional de las víctimas, facilitando testimonios más claros y coherentes.
Cami, Canela, Rai y Lina se han convertido en los nuevos integrantes del Servicio de Asistencia a Víctimas en Andalucía (SAVA) en Huelva, formando lo que se ha denominado “la patrulla canina de Justicia”. Estos cuatro perros, especialmente adiestrados, tienen como misión acompañar a menores y víctimas vulnerables durante su declaración en sedes judiciales. Este proyecto se inscribe dentro del Plan de Humanización de la Justicia, impulsado por la Consejería de Justicia, Administración Local y Función Pública, cuyo objetivo es reducir la ansiedad y el estrés que conlleva acudir a un juzgado.
El consejero José Antonio Nieto ha dado a conocer este innovador programa, conocido como AUVA, que se implementará en Huelva como experiencia piloto. La iniciativa busca promover una Justicia más cercana y accesible, ofreciendo un servicio personalizado que atienda las necesidades de los ciudadanos, especialmente aquellos en situación de vulnerabilidad. “Serán nuestra patrulla canina de Justicia”, ha afirmado Nieto.
La finalidad es transformar los juzgados en espacios más acogedores que eviten la victimización secundaria. Esto ocurre cuando las víctimas deben relatar hechos traumáticos ante jueces, fiscales y abogados. “Cuando una persona requiere la intervención de la Justicia, se encuentra en una situación vulnerable dentro de un entorno frío y desconocido. Algunas personas necesitan atención especial debido a su edad o discapacidad; el contacto con estos nobles aliados les proporciona apoyo y seguridad”, ha indicado el consejero.
Nieto también ha subrayado que la asistencia a víctimas durante procesos judiciales mediante perros adiestrados ha demostrado mejorar su bienestar emocional y la claridad de sus testimonios en países como Bélgica, Francia e Italia. En estos lugares se ha llevado a cabo el programa FYDO, financiado por la Comisión Europea. En España, comunidades como Madrid, Cataluña, Asturias, Galicia y Canarias han realizado experiencias similares.
Andalucía probará esta iniciativa por primera vez en Huelva, que servirá como referencia para evaluar su efectividad antes de extenderla a otras provincias. Esto será posible tras la firma de un convenio de colaboración entre la Consejería de Justicia y ATENIN, entidad encargada del SAVA en la provincia y responsable del adiestramiento y cuidado de los animales.
A pesar de ser un proyecto reciente, la directora del mismo, Lola Martínez, junto al adiestrador Manuel Álvarez, han estado trabajando desde el verano con Cami (una pastora belga de 4 años), Canela (teckel de 2 años), Rai (pinscher) y Lina (yorkshire terrier). Estos últimos están aún en proceso de adiestramiento. Para familiarizarlos con el entorno judicial, han visitado varias veces el Palacio de Justicia.
El adiestrador ha señalado que “no todos los perros son aptos para esta labor”; deben poseer un carácter especial. Se les entrena para atraer la atención del usuario y acercarse a las personas para proporcionarles tranquilidad mediante caricias.
Lola Martínez ha detallado que al menos uno de los perros estará siempre presente en las instalaciones del SAVA. El resto estará disponible según las necesidades. Los profesionales del servicio serán quienes determinen qué víctimas pueden beneficiarse del programa. Al acompañar a una víctima, el perro esperará junto a ella antes de entrar al edificio judicial y recorrerán juntos las instalaciones para crear un vínculo afectivo. Durante el día de la declaración, el animal permanecerá al lado de la víctima y habrá una sesión final de relajación con él.
"El objetivo es reducir la ansiedad, ya que influye negativamente en la coherencia de las declaraciones", ha explicado una terapeuta involucrada en el proyecto. Los perros ayudan a calmar antes que muchas personas. “Se trata de apoyar al sistema judicial para mejorar las declaraciones y mitigar los efectos negativos asociados a la victimización secundaria”, añadió.
Nieto ha informado que inicialmente se trabajará con perros facilitadores solo con menores; sin embargo, existe intención de extenderlo a otras víctimas vulnerables como aquellas afectadas por violencia de género o delitos sexuales, así como personas con discapacidad o mayores.
Nieto recordó que la humanización del sistema judicial es uno de los pilares del Plan Estratégico de Justicia, actualmente bajo desarrollo por parte del Gobierno andaluz. Este plan incluirá también medidas relacionadas con digitalización del sistema judicial; fomento de mediación como método alternativo para resolver conflictos; así como mejoras estructurales en todas las sedes judiciales andaluzas.
Entre las iniciativas ya implementadas destacan mejoras en accesibilidad mediante eliminación de barreras arquitectónicas y sensoriales en sedes judiciales; traducción a lectura fácil para facilitar comprensión; creación de salas privadas para víctimas de violencia machista; e incremento del número de Salas Gesell equipadas para grabar testimonios con garantías jurídicas que puedan ser utilizados como pruebas durante juicios.
Es un proyecto piloto del Plan de Humanización de la Justicia que incluye cuatro perros adiestrados para acompañar a menores y víctimas vulnerables en los juzgados, con el objetivo de reducir la ansiedad y el estrés durante las declaraciones y juicios.
El consejero José Antonio Nieto presentó este innovador proyecto en Huelva como parte de un esfuerzo por hacer la justicia más cercana y accesible para las personas vulnerables.
El objetivo es crear entornos más amigables en los juzgados para evitar la victimización secundaria y mejorar el bienestar emocional de las víctimas durante los procesos judiciales.
Se implementará inicialmente en Huelva como experiencia piloto, con planes de extenderlo a otras provincias si resulta exitoso.
En países como Bélgica, Francia e Italia, se ha demostrado que la asistencia a víctimas con perros adiestrados mejora su bienestar emocional y la coherencia y claridad de sus testimonios.
Inicialmente, se trabajará solo con menores, pero hay planes para extenderlo a otras víctimas vulnerables, incluyendo aquellas afectadas por violencia de género o delitos sexuales.
Además de la patrulla canina, se están implementando mejoras en accesibilidad, eliminación de barreras arquitectónicas y sensoriales, creación de salas de espera seguras para víctimas de violencia de género, y aumento de Salas Gesell para grabar testimonios.